En un duro golpe a la deportividad y al respeto en el fútbol, el Movimiento contra la Intolerancia ha denunciado ante la Fiscalía General del Estado los lamentables incidentes ocurridos durante el derbi madrileño en el estadio Cívitas Metropolitano el pasado domingo. En esta ocasión, los lanzamientos de objetos y los cánticos racistas en el fondo sur, donde se encuentran los ultras del Frente Atlético, han sido el centro de la polémica.
La denuncia, obtenida en exclusiva por Europa Press, exige una investigación exhaustiva de estos hechos, así como la determinación de responsabilidades penales y la intervención en futuras acciones similares.
Se han señalado varios posibles delitos, como la provocación a la discriminación, el odio y la violencia, el trato degradante y la asociación ilícita, entre otros. Se considera especialmente grave la ejecución de estos actos con alevosía y con motivaciones racistas.
Los improperios y los insultos racistas dirigidos al jugador del Real Madrid, Vinicius, y al guardameta Courtois fueron lamentables. Según la Liga, se registraron hasta 17 cánticos violentos, algunos con simbología neonazi en la Grada Sur del Estadio.
El sindicato de policía Jupol ha confirmado la presencia de encapuchados con simbología neonazi en el estadio, lo que generó una gran preocupación. Tras el gol del Real Madrid, algunos ultras lanzaron objetos al guardameta Courtois, lo que obligó a detener el partido y suspenderlo temporalmente.
Es alarmante que las Fuerzas de Seguridad no pudieran intervenir de inmediato debido a la falta de despliegue de la Policía Nacional por parte del Club, según lo revelado por el sindicato Jupol. La violencia y la falta de respeto continuaron incluso después del partido.
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