La Policía Nacional de España ha llevado a cabo la detención de cuatro individuos presuntamente vinculados a la banda Trinitarios, acusados de haber protagonizado un ataque violento con un arma blanca que dejó a un menor de la banda Dominicans Don’t Play (DDP) gravemente herido. Este incidente, ocurrido en mayo de 2024 en el barrio de Carabanchel, ha vuelto a poner de relieve los problemas de seguridad relacionados con estas organizaciones criminales.

El violento episodio tuvo lugar el 30 de mayo, cuando un grupo de jóvenes fue asaltado sorpresivamente en las proximidades de la plaza de la Arbolada. Durante el ataque, un adolescente, miembro de los DDP, sufrió severas lesiones en varias partes de su cuerpo, incluyendo el antebrazo, el hombro y el tórax, resultando herido por cortes de machete y cuchillos.

Según la información proporcionada por la Policía, los cuatro detenidos enfrentan graves acusaciones que incluyen pertenencia a una organización criminal, tentativa de homicidio y posesión ilegal de armas. De los arrestados, dos ya han sido enviados a prisión preventiva mientras se profundiza la investigación.

Las primeras indagaciones se iniciaron en el mismo momento en que se reportó el ataque. El menor agredido sufrió múltiples cortes, uno de los cuales quedó incrustado en su costado, dejando claro el nivel de violencia del suceso. Las autoridades lograron establecer que la agresión fue perpetrada por tres hombres quienes huyeron en un vehículo, en el que un cuarto individuo actuaba como conductor.

Las investigaciones revelaron que este ataque se llevó a cabo como venganza por un enfrentamiento anterior en el que varios miembros de DDP habían atacado a uno de los agresores. A pesar del tiempo transcurrido, y tras casi un año de esfuerzos investigativos, la Policía logró dar con las identidades de los sospechosos y proceder a su detención el 28 de mayo.

Finalmente, tras la presentación ante la justicia, se decidió que dos de los detenidos permanecerán en prisión mientras que uno de ellos, al haber sido menor en el momento del ataque, fue remitido a la Fiscalía de Menores de Madrid, que ordenó su ingreso en un centro de régimen cerrado para su tratamiento.