La Federación de la Comunidad de Madrid de Asociaciones de Padres y Madres del Alumnado (FAPA) Francisco Giner de los Ríos respalda la decisión de la presidenta Isabel Díaz Ayuso de implementar la jornada partida en los nuevos colegios de la región, argumentando que esta medida favorece la conciliación familiar y laboral, al mismo tiempo que prioriza "el interés superior del menor".
MADRID, 12 Sep.
Los sindicatos educativos han criticado la imposición de la jornada partida en los colegios de nueva construcción de la Comunidad de Madrid anunciada por Díaz Ayuso, durante su discurso en la Asamblea de Madrid, como parte de las iniciativas para extender la jornada escolar a partir del curso 2025/26.
La Federación de Enseñanza de CC.OO Madrid califica la medida como un "anuncio efectista" para desviar la atención de los problemas del inicio de curso, mientras que para CSIF representa "un nuevo ataque a la educación pública madrileña" y ANPE pide separar la jornada educativa de la asistencial.
Por otro lado, la FAPA Giner de los Ríos ha expresado su apoyo a políticas que pongan por delante el bienestar de los alumnos y la calidad educativa, respaldando así la iniciativa de Díaz Ayuso.
La implementación de la jornada partida en los nuevos colegios forma parte de una serie de acciones para extender la jornada escolar, ofreciendo horarios de mañana y tarde para las etapas formativas en los centros públicos de Infantil, Primaria y 1º y 2º de la ESO.
Además, se ofrecerán nuevas actividades en los centros que ya tienen jornada intensiva para que los alumnos con mayores dificultades puedan pasar más tiempo en el colegio. La Consejería de Educación también emitirá directrices para impedir que los colegios públicos que actualmente tienen jornada partida cambien a horario intensivo a partir del próximo curso 2025/26.
La Federación de Asociaciones de Padres y Madres considera que más tiempo escolar contribuye positivamente al desarrollo de los estudiantes, tanto académicamente como en su bienestar físico y emocional. Esperan que estas iniciativas ayuden a reducir el abandono escolar y ofrecer una educación más equitativa.
Sin embargo, CC.OO Madrid critica la falta de financiación para las actividades extraescolares propuestas por la presidenta, calificando la medida como un engaño a las familias. Por otro lado, ANPE Madrid cuestiona la concepción de la Administración respecto a los profesores y CSIF Madrid ve la medida como un ataque a la educación pública madrileña.
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