En un sorprendente caso de tráfico de personas, la Policía Nacional ha capturado a cinco individuos en Madrid y Córdoba involucrados en la compraventa de una recién nacida por la suma de 2.000 euros. Entre los arrestados se encuentra la madre de la bebé, quien ya había tenido serios problemas legales relacionados con la custodia de sus otros hijos.

La madre, cuya custodia de seis hijos fue retirada por la Fiscalía Provincial de Menores de Madrid en 2022, al parecer había hecho un acuerdo con una pareja de Córdoba que enfrenta dificultades para concebir. Según las acusaciones, esta transacción se llevó a cabo con el objetivo de beneficiar a la pareja en su anhelo de formar una familia, a la vez que la madre biológica intentaba resolver su propia situación complicada.

Los operativos de la Policía tuvieron lugar en Móstoles, donde fue capturada la madre, y en Córdoba, donde se detuvieron a los cuatro integrantes de la familia que intentaba adoptar a la menor a través de medios ilegales. Todos enfrentan serios cargos que incluyen alteración de la paternidad, detención ilegal y falsificación de documentos, según información facilitada por la Dirección General de la Policía. La bebé ha sido puesta bajo la tutela de los servicios sociales de la Junta de Andalucía.

La investigación comenzó a mediados de marzo, después de que una mujer de 37 años denunciara que su hija recién nacida había sido secuestrada por una familia en Córdoba, quienes exigían un pago de 3.000 euros a cambio de devolverle a su hija.

La madre denunciante compartió que conoció a un hombre de 24 años durante una fiesta en Madrid, y temiendo que los servicios sociales le quitaran la custodia de su hija al nacer, accedió a ir con él a Córdoba, donde prometió cuidarla durante el embarazo. Sin embargo, tras dar a luz, según su relato, la familia anfitriona la retuvo, haciéndole promesas sobre el retorno de su bebé que nunca cumplió.

Después de una semana de incertidumbre y amenazas de la familia a la que había confiado su hija, la madre empezó a temer por su bienestar y decidió presentar la denuncia, lo que dio inicio a la operación policial.

Las investigaciones evidenciaron un acuerdo ilícito en el que se pactó una compensación económica de 2.000 euros por la transferencia del bebé. Además, se descubrió que, tras ser dada de alta, la madre, junto con los supuestos compradores, había acudido al Registro Civil en Córdoba, donde ellos se presentaron como los padres de la recién nacida.

Un detalle revelador de la investigación fue la transacción de 2.000 euros, que el comprador realizó en un cajero automático y que fue entregada a la madre antes de que ella fuera llevada de regreso a Madrid. En 2022, había sido previamente despojada de la custodia de sus otros hijos, los cuales están bajo la protección de la Comunidad de Madrid debido a su situación de desamparo.

La trama se complicó cuando se descubrió que la madre se había arrepentido de su decisión de vender a su hija, lo que llevó a la familia adoptiva a presionarla para que les devolviera el dinero entregado, además de exigirle un reembolso por la estancia en Córdoba.

Finalmente, tras corroborar las inconsistencias en la versión presentada por la madre en su denuncia original, las autoridades decidieron detenerla a finales de marzo en Móstoles. Simultáneamente, se llevó a cabo la detención de los cuatro implicados en Córdoba, quienes se encontraban en camino a una consulta médica para la bebé. Todos los arrestados fueron presentados ante la justicia, con la menor siendo trasladada a un centro de protección en la capital cordobesa.