El panorama político en Madrid ha dado un giro inesperado con la reciente decisión del secretario general del PSOE-M, Juan Lobato, quien ha optado por dimitir de su cargo. Esta sorprendente noticia se produce tras la polémica generada por la documentación que presentó en notaría, en la que se captura una conversación con un alto funcionario de Moncloa. En esa comunicación, este funcionario le reenvió un correo electrónico que supuestamente contenía confesiones sobre delitos fiscales por parte de la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

Lobato había mostrado recientemente una tenaz resistencia ante la presión ejercida por su propio partido, llegando incluso a desafiar a la dirección nacional del PSOE, conocida como Ferraz. A pesar de las críticas que recibió en torno al "linchamiento" que habría experimentado por parte de los líderes de su formación, ha decidido dar un paso al lado, comunicando su decisión a través de una carta dirigida a la militancia que fue posteriormente difundida a los medios de comunicación.

Este desenlace responde a un clamor casi unánime dentro del PSOE-M, donde sus miembros exigían su renuncia después de considerarle culpable de haber "traicionado" al partido. Fuentes del partido señalaron a Europa Press que el descontento hacia su gestión había empezado a manifestarse públicamente días antes de su renuncia, y que esta situación culminó en un rechazo abierto en la jornada previa a su decisión. Mientras tanto, se espera que el ministro de Transformación Digital y Función Pública, Óscar López, llegue para intentar restablecer el orden en una federación madrileña marcada por la inestabilidad reciente.