En un giro polémico en la política madrileña, Joaquín Leguina, exmandatario de la Comunidad de Madrid, ha salido al paso de las acusaciones tras finalizar el juicio que interpuso contra el PSOE por su expulsión del partido en diciembre de 2022. Leguina ha asegurado que “mienten como bellacos”, señalando que el trasfondo de esta situación se origina a raíz de sus críticas hacia el presidente Pedro Sánchez en un libro que publicó recientemente.

Al concluir la vista, Leguina no dudó en expresar su opinión sobre la reacción del PSOE frente a sus declaraciones. “No le debió sentar muy bien”, manifestó ante los medios, haciendo referencia a su confrontación con Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE, quien ha argumentado que las afirmaciones de Leguina fueron lo suficientemente graves como para justificar su expulsión del partido.

La expulsión de Joaquín Leguina del PSOE se formalizó en diciembre de 2022, un acto que se desencadenó tras su respaldo a Isabel Díaz Ayuso durante las elecciones autonómicas del 4 de mayo de 2021. Sin embargo, Leguina ha defendido su postura, negando haber solicitado el voto para la actual presidenta de la Comunidad de Madrid, lo que añade un matiz a la controversia que rodea este caso.

La demanda presentada por el expolítico se dirige contra Santos Cerdán y la dirigente Marta López Expósito, y busca su reintegración como miembro del partido, además de una indemnización de 18.000 euros por daños que alega haber sufrido. En sus declaraciones, Leguina ha insistido en que “mienten como bellacos”, al criticar la manera en que el partido lo ha tratado, sugiriendo que han estado “colgándolo de una cuerda” durante años, mientras que él se siente merecedor de “algo de respeto” por su trayectoria en el socialismo.

En el transcurso del juicio, Leguina no escatimó en criticar al presidente Pedro Sánchez, acusándolo de “desbaratar” los derechos de la militancia. “El Partido Socialista se ha convertido en un partido donde no se puede discutir”, enfatizó, poniendo de manifiesto su indignación por la falta de debate y discrepancia dentro de la formación.

El exmandatario madrileño ha solicitado a la Justicia que reconozca la vulneración de su derecho fundamental de militancia en el PSOE y que se detenga el procedimiento que llevó a su expulsión. Sin embargo, el pasado abril, su petición de medidas cautelares fue desestimada por el juez, quien no aceptó frenar la decisión del partido de suspender su militancia.

Leguina está determinado a que se declare la nulidad de la resolución del 23 de noviembre de 2022, que le suspendió cautelarmente, argumentando que esto ha causado daños morales al coartar su derecho a participar en la vida pública y ha limitado su libertad de crítica y expresión, principios que él considera fundamentales en una democracia.

El proceder del PSOE contra Leguina se remonta al 6 de mayo de 2021, cuando se abrió un expediente de expulsión tras las elecciones autonómicas. El partido interpretó que él y Nicolás Redondo Terreros habían instado a votar por Isabel Díaz Ayuso, un acto que fue motivo de controversia interno en la formación. A pesar de ello, el expediente contra Redondo fue archivado al determinar que no había incurrido en tal acción, lo que llevó a este exdirigente a señalar que esta decisión evidencia un amplio margen de discrepancia dentro del PSOE.

Por su parte, el expediente de expulsión de Joaquín Leguina continuó su proceso, culminando con la notificación formal que recibió en su hogar a través de un burofax de Correos, informándole de su suspensión de militancia, lo que ha llevado a este experimentado político a buscar justicia y restablecer su nombre dentro del partido al que durante años ha pertenecido.