En el Ayuntamiento de Leganés, la situación política se torna cada vez más tensa, especialmente con la reciente movida del PSOE por iniciar negociaciones para una moción de censura en contra del Gobierno del PP y Unión por Leganés (ULEG). La jugada, que resulta ser un intento calculado para desbancar a la actual administración, requeriría, sin embargo, de la colaboración de Vox, lo que complica el panorama.

Javier Márquez, portavoz del PSOE en la localidad, ha expresado su intención de contactar a los líderes de los diferentes grupos políticos para discutir la posibilidad de presentar esta moción. En sus declaraciones, ha reiterado con contundencia que tanto el alcalde, Miguel Ángel Recuenco, como su compañero, Carlos Delgado, "tienen que irse ya". Es claro que Márquez busca un cambio inmediato para intentar revitalizar una ciudad que, según él, ha estado estancada durante los últimos dos años sin avances significativos.

El contexto aritmético en la Corporación es crucial; para que la moción prospere, los dos concejales de Vox son esenciales. Esto plantearía una notable coalición al unir fuerzas entre los socialistas, que ocuparían ocho escaños, Más Madrid con sus tres ediles, y los dos representantes de Podemos-IU, duplicando así el poder ante el actual gobierno.

Márquez ha sido enfático en sus intenciones: "Voy a barajar opciones y hablar sobre cómo avanzar con la moción de censura. Es hora de que se vayan". No se detiene en su búsqueda de apoyo y está determinado a explorar todas las alternativas que le permitan concretar este proyecto político.

En respuesta a este movimiento, Carlos Delgado, el concejal de Obras y portavoz de ULEG, ha lanzado críticas al PSOE, cuestionando si realmente unirán sus votos con Vox. En un video compartido en las redes sociales, Delgado se pregunta: "¿Está al tanto Pedro Sánchez de este arreglo?". Además, se interroga sobre si es deseable que, en un giro inesperado, Vox permita que sus votos favorezcan la llegada al poder de un candidato del PSOE.

El edil también ha hecho hincapié en la necesidad de que los grupos de Podemos y Más Madrid aclaren su posición, resaltando su carácter como "actores imprescindibles" en este nuevo escenario. Delgado advierte que esto es una cuestión de prioridad para ULEG: los intereses de los vecinos deben prevalecer por encima de cualquier ansia de poder. La idea de alianzas "extrañas" entre la izquierda y la derecha es algo que le preocupa profundamente.

En los últimos días, la oposición ha demostrado su capacidad de acción al rechazar en dos ocasiones el presupuesto municipal propuesto por el Gobierno de PP y ULEG. La batalla política en Leganés está lejos de terminar, y las próximas semanas serán decisivas para el futuro de la administración local.