Un grupo de manifestantes conservadores ha llevado a cabo una protesta en la Gran Vía de Madrid y frente al Congreso de los Diputados, en oposición a los pactos entre el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y los independentistas catalanes. Un dispositivo policial de gran envergadura ha bloqueado el acceso a la sede socialista de Ferraz para garantizar la seguridad durante las manifestaciones.

La concentración se inició en el Parque del Oeste a las 19:00 horas, y posteriormente los manifestantes se desplazaron hacia Ferraz. Poco antes de las 20:00 horas, se trasladaron a la Gran Vía, con un fuerte cordón policial de agentes de la Policía de Intervención (UIP), y posteriormente se concentraron en Neptuno luego de que la Policía blindara los alrededores del Congreso de los Diputados.

En su regreso a la calle Ferraz, los manifestantes abarrotaron Marqués de Urquijo, lanzando botellas de cristal y huevos a los agentes y a los profesionales de los medios de comunicación, llegando incluso a apuntarles con un láser verde para impedirles trabajar. La multitud congregada ha expresado su descontento con el Gobierno y sus pactos con los independentistas a través de proclamas y consignas en contra del presidente Pedro Sánchez.

La Policía ha procedido a cortar el acceso a la calle Ferraz, Buen Suceso y parte de Marqués Urquijo desde el inicio de la concentración. Los manifestantes, que se congregaron a las 19:00 horas a pesar de que la convocatoria estaba establecida para las 20:00 horas en redes sociales, han sido acompañados por líderes y representantes de otros partidos políticos de tendencia conservadora, como Vox.

La llegada de las protestas al Congreso de los Diputados ha provocado que la Policía Nacional refuerce la seguridad en la zona, incrementando el número de antidisturbios y colocando vallas en los accesos. Los manifestantes han mantenido sus protestas en la Plaza de Neptuno, cortando el tráfico y expresando su rechazo hacia Pedro Sánchez y la izquierda.