En un nuevo capítulo de la saga de movilidad en la capital española, el Ayuntamiento de Madrid y el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible se preparan para una discusión crucial este viernes. Ambas instituciones tienen como objetivo alcanzar un acuerdo definitivo sobre la movilidad en la A-5, en el contexto de las obras de soterramiento que han suscitado cierto descontento entre las partes.

Este encuentro se llevará a cabo en la sede del Ministerio y contará con la presencia del delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, así como del secretario general de Movilidad Sostenible, Álvaro Fernández Heredia. Se espera que esta reunión sea una oportunidad para resolver las discrepancias que han surgido en la planificación de las obras.

Recientemente, el Ayuntamiento y el Gobierno central no lograron un acuerdo durante su última reunión en el Consorcio de Transportes de Madrid, lo que llevó al Consistorio a acusar al Ministerio de "deslealtad". El tema central de la controversia radica en la ejecución de los trabajos sin considerar la posibilidad de retrasarlos, lo que ha añadido tensión a las relaciones entre ambas entidades.

Carabante no dudó en señalar la falta de lealtad del Ministerio, enfatizando que se comunicaron detalles sobre el plan de movilidad a la prensa antes que a ellos. Además, criticó las razones expuestas por el Ministerio para solicitar un aplazamiento en las obras de la A-5, indicando que estas estaban justificadas con la necesidad de realizar mejoras en los servicios de Cercanías, lo cual a su juicio no tenía fundamento sólido.

"Hasta el momento, no hemos recibido explicaciones claras sobre las obras que deberían realizarse para proporcionar alternativas a los servicios de Cercanías en la ciudad de Madrid. De hecho, los datos que nos ha facilitado el Ministerio indican que aún pueden ofrecer 47.700 plazas adicionales sin necesidad de que se ejecuten las obras. Por lo tanto, aseguraría que ambos aspectos, la cantidad de plazas y la capacidad, son completamente adecuados", afirmó Carabante.

En un intento por colaborar, el Ministerio de Transportes ha sugerido al Ayuntamiento que se postergaran las obras de soterramiento hasta marzo, con el fin de asegurar el desarrollo de un plan de movilidad alternativo. Además, el Ministerio se ha comprometido a ofrecer temporalmente la gratuidad en el uso de la R-5, aunque ello dependerá de la disposición del Ayuntamiento para contribuir económicamente a esta medida.

Fuentes dentro del Ministerio, encabezado por Óscar Puente, expresaron a Europa Press que "no sería razonable" que el Ayuntamiento proponga la gratuidad en la R-5 sin asumir su parte en el esfuerzo financiero. Mientras tanto, el Gobierno planea aumentar sus servicios, mejorando la conectividad de los cercanías de Renfe entre un 25% y un 40% en horas punta.

Por otra parte, el Ministerio también ha subrayado la necesidad de mejorar los servicios de autobuses interurbanos, criticando que estos no limiten su recorrido a la zona de Cuatro Vientos. En esta línea, el representante del Ministerio reafirmó el compromiso de reforzar los servicios de Cercanías de inmediato, con incrementos que oscilan entre el 25% y el 40%. "Es crucial resaltar la relevancia de este esfuerzo, ya que hemos observado que Metro de Madrid solo aumenta sus servicios en un 10% y la EMT en un 9%. En cambio, los autobuses interurbanos enfrentan recortes, limitando su acceso a Madrid en el carril bus", concluyó con desagrado.