La Comunidad de Madrid tiene previsto ampliar la red de transporte a demanda hasta los 75 municipios, duplicando así la inversión en este servicio. El nuevo intercambiador de transporte de Valdebebas, que conectará la futura prolongación de la Línea 11 de Metro, los autobuses urbanos 171 y 174 y el bus rápido y la línea C-1 de Cercanías Renfe, estará inaugurado en el primer semestre de 2024.
La Consejería de Transportes, Vivienda e Infraestructuras ha anunciado que en esta legislatura se construirán cuatro nuevos intercambiadores de transporte en la región, con una inversión estimada de 234 millones de euros. El intercambiador de Valdebebas contará con una inversión de más de 30 millones de euros y una superficie de casi 7.000 metros cuadrados.
Esta nueva infraestructura contará con dos plantas, cuatro ascensores y dos escaleras mecánicas, así como 14 locales comerciales. También contará con un aparcamiento disuasorio, estaciones de recarga para vehículos eléctricos, dársenas de autobuses y un carril para taxi. Conectará la futura prolongación de la Línea 11 de Metro, los autobuses urbanos 171 y 174, la primera línea de bus rápido que conecta Valdebebas y el Hospital Ramón y Cajal, y la línea C-1 de Cercanías Renfe.
Además de Valdebebas, se pondrán en marcha los intercambiadores de Conde de Casal, Legazpi y Chamartín. El intercambiador de Conde de Casal ordenará 24 líneas de autobuses, el de Legazpi facilitará la conexión con las líneas 3 y 6 de Metro de Madrid, y el de Chamartín será uno de los más relevantes por su conexión con las principales líneas de Cercanías, Renfe de Media y Larga Distancia, Alta Velocidad y varias líneas de autobús de la Empresa Municipal de Transportes (EMT).
Por otro lado, la Comunidad de Madrid también tiene previsto ampliar el servicio de transporte a demanda a 35 municipios del suroeste y sureste de la región antes de que finalice el año. Además, se ampliará el servicio en la sierra norte a otras nueve localidades. Estas medidas supondrán duplicar la inversión en este servicio, beneficiando a un total de 106.000 madrileños de 75 pueblos de la región.
El transporte a demanda se realiza mediante taxis en aquellos municipios con los que la Comunidad ha llegado a convenios. Antes de que termine el año, se establecerán las Áreas de Prestación Conjunta para que puedan operar en los municipios integrados en su área territorial, ampliando su área de trabajo sin modificar su licencia.
Este refuerzo del transporte a demanda tiene como objetivo contribuir al desarrollo del medio rural y aumentar la movilidad de los vecinos, ampliando su libertad de elección a la hora de desplazarse. Los usuarios pagan tarifas fijas en función de la distancia del recorrido, y la inversión del Gobierno regional también financia los gastos de mantenimiento en las centralitas telefónicas y las aplicaciones informáticas para solicitar este servicio.