Crónica Madrid.

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Indicios revelan múltiples implicados en el caso de Meco y exculpan al sospechoso inicial.

Indicios revelan múltiples implicados en el caso de Meco y exculpan al sospechoso inicial.

Un nuevo giro en la investigación del asesinato de Miriam Vallejo, una joven cuyo cuerpo fue encontrado con 89 puñaladas en enero de 2019, ha llevado a las autoridades a reabrir el caso, que hasta ahora había permanecido sin resolver. La Guardia Civil ha detectado nuevos indicios que sugieren la posible implicación de múltiples responsables, lo que descarta al anterior principal sospechoso, quien había sido el foco de las pesquisas hasta el momento.

Este devastador crimen, que tuvo lugar en la carretera que conecta Villanueva de la Torre (Guadalajara) y Meco, dejó a la comunidad local en estado de shock y, tras dos años de incertidumbre, el caso fue archivado en enero de 2023 por falta de pruebas concluyentes. Sin embargo, reciente información ha permitido a los investigadores volver a la escena del crimen y realizar nuevas pruebas con la esperanza de despejar las dudas que persisten.

El equipo del Grupo de Homicidios de la Guardia Civil ha llevado a cabo una reconstrucción meticulosa de los eventos de aquella fatídica noche, desde el momento en que Miriam salió de su hogar hasta el lugar donde fue atacada. Para ello, un agente de la Guardia Civil realizó el trayecto haciendo uso de cuatro perros especializados, y en el lugar del crimen se simuló la escena al gritar: "¡soltadme, dejadme!", un indicio que sugiere la posible participación de otros individuos en el ataque.

El hallazgo del cuerpo ocurrió cuando una pareja que paseaba por la zona encontró a Miriam agonizando y llamó a los servicios de emergencia, que lamentablemente no pudieron salvarle la vida debido a las graves lesiones sufridas. Durante la recreación del asesinato, los investigadores utilizaron drones y perros de búsqueda, además de contar con la presencia del Grupo de Homicidios y la Unidad de Laboratorio de la Guardia Civil.

Una representante de la Comandancia de la Guardia Civil en Madrid afirmó que la decisión de reactivar el caso se basa en la recolección de nuevos indicios que podrían esclarecer el asesinato. Los nuevos datos han invalidado las acusaciones contra el anterior sospechoso, Sergio S. M., quien había sido implicado tras encontrarse ADN en la ropa de la víctima. También se había considerado a otro individuo, un exrecluso, que confesó haber cometido el crimen, aunque se le restó credibilidad.

La portavoz subrayó la responsabilidad de la Guardia Civil de continuar investigando hasta que se logre aclarar lo sucedido, instando a la familia de Miriam a mantener la confianza en la labor de las autoridades. “No olvidaremos este caso y no descansaremos hasta lograr justicia”, enfatizó.

El asesinato de Miriam tuvo lugar mientras disfrutaba de un paseo con sus perros, un acto cotidiano que se tornó en tragedia. En el juicio de 2023, la jueza descendió el caso a un archivo, alegando que la investigación no había dado resultados. Este desenlace se produjo a raíz de una apelación fallida que obligó a la jueza a justiciar su decisión en un contexto de frustración por el estancamiento de las pesquisas.

El auto judicial liberó a Sergio y a otro sospechoso debido a la falta de pruebas que lo vinculaban directamente al crimen. La defensa de Sergio insistió en que el ADN encontrado podría haber sido transferido accidentalmente, un argumento que no convenció a las autoridades en su momento.

En el transcurso de la investigación, se solicitó a la forense que ampliara su informe de autopsia para determinar si realmente múltiples agresores pudieron estar involucrados, lo que representa una línea de defensa fundamental en este caso oscuro y perturbador.