Crónica Madrid.

Crónica Madrid.

El Ayuntamiento contabilizará a los empadronados para calcular la tasa de basuras a partir de 2026.

El Ayuntamiento contabilizará a los empadronados para calcular la tasa de basuras a partir de 2026.

MADRID, 23 de octubre. El Ayuntamiento de Madrid ha anunciado una nueva estrategia para la gestión de la tasa de basura que entrará en vigor en 2026. La delegada de Hacienda, Engracia Hidalgo, reveló durante una conferencia reciente que la cantidad que los ciudadanos deberán pagar ahora dependerá del número de personas empadronadas en cada vivienda.

Este cambio busca promover una mayor equidad en el sistema tributario local. Hidalgo explicó que la inclusión de la variable del empadronamiento es un reto técnico que pocos municipios han logrado implementar, lo cual demuestra el esfuerzo de la administración madrileña por modernizar su política fiscal.

La nueva estructura tarifaria se basará en diez categorías, que van desde hogares con una sola persona hasta aquellos con diez o más empadronados. Este modelo se aplicará a partir del 1 de enero de 2026 y permitirá un ajuste más justo a la realidad de cada residencia.

El cálculo de la tasa se llevará a cabo teniendo en cuenta dos elementos clave: una tarifa básica que todo inmueble deberá abonar por el acceso al servicio de recogida y tratamiento de residuos, y una tarifa adicional que dependerá de la cantidad de basura producida y del nivel de reciclaje alcanzado en los distintos barrios, basado en datos del Parque Tecnológico de Valdemingómez.

Según las proyecciones, el recibo promedio de la tasa en 2026 se situará en 142,6 euros, un monto prácticamente igual al del año anterior, aunque variará en función del número de empadronados. Se estima que esta renovación generará ingresos cercanos a los 300 millones de euros, sin incluir el coste de la limpieza de calles, lo que ha sido una práctica en otros municipios que ha encarecido significativamente las tasas.

Unos 1,7 millones de inmuebles estarán sujetos al pago de esta tasa. Al igual que en 2025, se exime a garajes y trasteros que no producen residuos, así como a terrenos vacíos y edificios en ruina. También se ha introducido un matiz para los garajes de uso industrial que, si se destinan completamente a uso residencial, no estarán obligados a abonar la tasa siempre que se presente una declaración responsable correspondiente.

En otro aspecto notable, el Ayuntamiento ha decidido aplicar reducciones en la cuota para familias numerosas, equivalente a las que ya existen en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). Esta medida beneficiará a más de 38,000 familias vulnerables al mantener una reducción del 100% en la cuota para quienes perciban el Ingreso Mínimo Vital y la Renta Mínima de Inserción, lo que representa un ahorro significativo de 4,71 millones de euros.

Las viviendas deshabitadas y locales sin actividad también solo pagarán la tarifa básica por el servicio, siempre y cuando se justifique su estado de inactividad de manera anual mediante la información del padrón municipal.

Adicionalmente, se establecerá el principio de 'quien contamina, paga', lo que significa que la responsabilidad del pago recae en el propietario que genera los residuos, aunque puede trasmitir ese coste al inquilino si lo estima necesario. En el segundo año de implementación de esta tasa, los ciudadanos también tendrán la opción de un Pago a la Carta, que podría reducir su cuota hasta un 5%, con un límite de ahorro de 15 euros.