Agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil han llevado a cabo una importante operación en Madrid y Las Palmas, deteniendo a once personas en la capital y a una en la provincia canaria. El objetivo de la operación era acabar con una red de explotación sexual que operaba en un chalé en Madrid.

Según la Policía Nacional, las víctimas, que vivían en condiciones insalubres y sin ventanas, fueron liberadas durante la acción conjunta de ambos cuerpos de seguridad. Además de la explotación sexual, algunas de las víctimas eran obligadas a transportar droga cuando salían al exterior.

La organización criminal se dedicaba a captar a sus víctimas en países de Sudamérica, donde se aprovechaban de su situación de vulnerabilidad ofreciéndoles trabajos supuestamente dignos y bien remunerados. Una vez en España, las víctimas eran informadas de que tenían una deuda económica con la organización y que debían pagarla ejerciendo la prostitución.

Las mujeres eran obligadas a vivir en un sótano sin ventanas, en condiciones infrahumanas, y tenían que estar disponibles las 24 horas del día. Además, debían realizar ocho horas diarias de servicios sexuales si querían disfrutar de solo dos horas libres al día.

La red criminal estaba formada por miembros de origen sudamericano, algunos de ellos con vínculos familiares entre ellos. Contaban con una fuerte infraestructura en España, destacando la existencia de un chalé que funcionaba como prostíbulo.

La operación ha logrado incautar más de 30.000 euros, 30 gramos de cocaína, 13 gramos de marihuana y diversa documentación relacionada con las actividades de la red. Además, se ha constatado que los implicados habían cobrado más de 1,2 millones de euros a través de una plataforma de pago.

En la operación han colaborado organizaciones no gubernamentales como Operation Underground Railroad y Amar Dragoste Con la trata no hay trato. La operación forma parte del Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual.