En un reciente clamor por una política más equitativa en la gestión de menores migrantes, Óscar López, líder del PSOE-M y actual ministro para la Transformación Digital y Función Pública, ha demandado a Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, que se implemente un enfoque "objetivo" y "transparente" para el reparto de estos menores en vez de centralizarlos en el centro de La Cantueña, en Fuenlabrada.

López, tras su encuentro con la portavoz del PSOE en Rivas-Vaciamadrid, Mónica Carazo, no dudó en expresar su preocupación al cuestionar: "¿Qué habría pasado si el gobierno hubiera señalado a todos a Madrid? Es insólito que Ayuso proponga agruparlos en un solo lugar. ¿No se percibe el trasfondo racista y xenófobo de tal afirmación?".

Este intercambio de acusaciones se produjo en un contexto donde se informó sobre la coalición entre el PSOE y Junts para el manejo de los menores migrantes. En respuesta, Ayuso anunció su intención de llevar el pacto ante la justicia, a la vez que sostuvieron que La Cantueña sería el destino elegido para estos niños. El alcalde de Fuenlabrada, Javier Ayala del PSOE, criticó la actitud de la presidenta autonómica, sugiriendo que su postura buscaba sacar ventaja política de una situación que carece de las condiciones adecuadas.

Defendiendo a su localidad, López subrayó que Fuenlabrada es un "municipio solidario" que ha brindado refugio a un número considerable de acogidos y que está preparado para recibir a menores adicionales, tal como lo harían otras localidades. Enfatizó la importancia de tener criterios claros en el reparto: "Lo que exijo para Madrid es lo mismo que se aplica en el ámbito nacional. Necesitamos un sistema de distribución que sea claro y no arbitario".

El secretario general también argumentó que si se adoptaran los criterios que pide para el Gobierno regional, se podría determinar con precisión el número de niños que debería corresponder a cada localidad, desde Fuenlabrada hasta Madrid, Coslada, Majadahonda o Pozuelo.

Finalmente, López reiteró sus críticas hacia Ayuso, acusándola de mantener un "discurso racista" y recordó que la integración de los menores ucranianos no había presentado complicaciones. "No hay diferencia con el discurso de Vox. Es esencial que comprendan que se trata de derechos humanos", concluyó de manera contundente.