En un ambiente político cada vez más tenso, la portavoz del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en el Ayuntamiento de Madrid, Reyes Maroto, ha lanzado duras críticas al alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida. Maroto lo ha acusado de convertirse en un "portavoz de un presunto delincuente", al referirse a Víctor de Aldama, quien está implicado en el caso de las mascarillas. En este contexto, Maroto ha instado a Almeida a tener "un gesto bonito" y a ofrecer un transporte adecuado a su "mano derecha" cuando esta deba testificar el próximo 12 de febrero.

La diputada socialista instó a Almeida a mantener la calma, señalando que "esto acaba de comenzar", lo que sugiere que el caso y las investigaciones relacionadas tienen mucho camino por recorrer. Maroto hizo hincapié en que su partido no permitirá más "bulos ni mentiras" provenientes de la boca del alcalde, lo que refuerza la idea de un clima de tensión y desconfianza entre las dos formaciones políticas.

El recrudecimiento de la polémica se intensificó tras el anuncio del PSOE de que iniciará acciones legales contra el alcalde. Esto se debe a sus declaraciones recientes, en las cuales insinuó que existían vínculos entre Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE, y Víctor de Aldama, el presunto intermediario en la conocida 'trama Koldo'. La situación ha dado pie a intercambios agudos y acusaciones entre los dos bandos.

Maroto ha puesto en tela de juicio la credibilidad del alcalde, sugiriendo que parece priorizar las afirmaciones de un presunto criminal sobre la inocencia de personas ajenas al caso. Además, reiteró la importancia de que Almeida acompañe en su desplazamiento para declarar tanto a Matilde García, excoordinadora de Alcaldía y actual presidenta de ANGED, como a un familiar suyo, puesto que ambos están citados como testigos en el caso relacionado con la estafa de millones de euros a los madrileños perpetrada por Alberto Luceño y Luis Medina.

En una respuesta directa a las afirmaciones del alcalde, que le había aconsejado sobre supuestos mensajes de WhatsApp que Maroto habría intercambiado con Aldama, la portavoz socialista le ha aconsejado que aclare su propia relación con los involucrados en el escándalo. Al preguntarle sobre las comunicaciones que pudo haber tenido con Medina y Luceño, la diputada enfatizó que Almeida también debería ser objeto de un examen público sobre sus acciones.

Se ha fijado el 11 de febrero como la fecha en que Luceño y Medina comparecerán ante la justicia, mientras que al día siguiente están llamados a declarar los testigos, lo que pone de relieve la magnitud de la crisis y la creciente presión sobre el alcalde. Maroto también ha instado a Almeida a pronunciarse acerca de si mantuvo algún tipo de conversación con los implicados, cuestionando su falta de transparencia en esta delicada situación.

La portavoz del PSOE ha retado al alcalde, sugiriendo que como abogado debería estar preocupado por el juicio que se avecina y por las implicaciones que tiene para la comunidad madrileña. La alarma social provocada por el presunto fraude en la venta de mascarillas es un tema que no solo afecta a la imagen del gobierno local, sino que también plantea preguntas urgentes sobre la rendición de cuentas y la ética en el ejercicio del poder.