En la noche del 28 de diciembre de 2023, Carabanchel se convirtió en el escenario de una violenta confrontación que involucró a miembros de la conocida banda de los Trinitarios. Testigos presenciales confirmaron que uno de los agresores fue aprehendido por las autoridades mientras intentaba escapar tras haber causado graves heridas a varios jóvenes con machetes.

El proceso judicial comenzó ayer en la Audiencia Provincial de Madrid y se prevé que se extienda durante dos semanas. El individuo en cuestión, que se encuentra en prisión preventiva, enfrenta una dura acusación, con una posible pena de trece años y medio de cárcel por tres delitos de lesiones en los que utilizó un arma peligrosa, además de pertenencia a una organización criminal.

Uno de los coacusados logró llegar a un acuerdo con la fiscalía, lo que le permitirá reducir su condena a cuatro años y medio; este admitió ser parte de la misma banda. Su reconocimiento fue clave en el desarrollo del caso.

Los incidentes se desataron el 23 de diciembre de 2023, cuando uno de los acusados, acompañado de otras tres personas no identificadas, se acercaron a la discoteca Fénix, situada en la Avenida de la Emperatriz Isabel, número 13. Armados con machetes de gran tamaño, comenzaron a atacar a varias víctimas mientras gritaban consignas como "Patria" y afirmaban ser de los Trinitarios, y que estaban allí "a por los pencos".

Durante las audiencias, agentes de la Brigada de Información Provincial ofrecieron detalles sobre la captura del principal sospechoso, quien fue reconocido por testigos. Al ser interceptado por la policía, este alegó haber salido de su hogar, aunque sorprendió a los agentes al portar un sello de la discoteca donde ocurrió el ataque.

Un inspector de la Policía declaró que los testigos describieron a los asaltantes vestían de negro, portando ropa típica asociada con los Trinitarios. En medio del caos, los mismos agentes tuvieron que proporcionar atención médica urgente a uno de los heridos, quien presentaba cortes profundos que ponían en riesgo su vida.

Los acusados forman parte activa de los Trinitarios, una banda latina que ha expandido su influencia en diversos barrios de la Comunidad de Madrid, incluidas localidades como Torrejón de Ardoz y Alcalá de Henares, así como en barrios de Madrid como Orcasitas, Tetuán, y Vallecas, entre otros. Su red de operaciones continúa generando preocupación en la sociedad madrileña.