Crónica Madrid.

Crónica Madrid.

Grafiteros sancionados han trabajado 1.228 horas y limpiado 2.625 m² en lugar de pagar multas.

Grafiteros sancionados han trabajado 1.228 horas y limpiado 2.625 m² en lugar de pagar multas.

El Ayuntamiento de Madrid ha revelado información sobre el perfil de los individuos que se han beneficiado del nuevo programa de trabajo comunitario, en el que se ofrece la posibilidad de conmutar multas impuestas por grafitis mediante labores de limpieza. En este sentido, se ha observado que la mayoría de los participantes son hombres jóvenes, con un notable 33% de ellos poseyendo educación universitaria.

En una reciente visita a la plaza de Juan Muñoz, el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, junto a otros concejales, se llevó a cabo una supervisión de los trabajos realizados por algunos de estos grafiteros. Hasta el momento, han completado más de 1.228 horas de trabajo que han permitido limpiar un área total de 2.625 metros cuadrados de espacio público.

La iniciativa se originó a partir de un cambio en diciembre del año pasado en el protocolo de sanciones ambientales, implementado por el Ayuntamiento. Este ajuste permite que aquellos que infrinjan las normas de grafitis en la calle puedan optar por participar en actividades de limpieza de las pintadas como alternativa a las multas económicas que de otro modo tendrían que abonar.

Hasta el momento, 33 grafiteros han participado en este programa entre diciembre y febrero. La duración de su trabajo ha variado en función del monto de las sanciones recibidas; algunos realizaron desde 14 horas de labores y otros hasta 60, en función de la gravedad de la multa. En conjunto, sus trabajos han permitido reducir la carga económica de los expedientes sancionadores en aproximadamente 64.100 euros.

En cuanto a la demografía de los participantes, un 76% son hombres, y la gran mayoría son jóvenes, con un 61% de ellos en el rango de edad de 18 a 29 años. Por otra parte, un 18% posee estudios universitarios y un 15% formación de posgrado, lo que implica que cerca de un tercio de estos individuos tiene algún tipo de educación superior. Adicionalmente, un 22% de los participantes está actualmente cursando la ESO y un 15% el Bachillerato.

En términos de nacionalidad, de los primeros 33 participantes, 31 son españoles, con uno más de Rumanía y otro de Venezuela. La mayoría reside en Madrid, y el distrito de Moncloa-Aravaca presenta el mayor número de sanciones, alcanzando un total de diez casos. Otros distritos destacados incluyen Latina y Carabanchel, con 6 y 5 multas respectivamente.

Las actividades de limpieza se han llevado a cabo en varias localidades de la ciudad, cubriendo un área de 2.625 m² en diferentes distritos. Todo el proceso ha estado supervisado por un tutor o educador para asegurar que se cumplan los estándares establecidos.

Los participantes han expresado su opinión sobre el programa, y un 76% considera que recibieron la información adecuada, mientras que un 91% valora positivamente la opción de trabajar en lugar de pagar multas. Asimismo, un elevado 67% percibe esta medida como una forma eficaz de generar conciencia sobre el impacto del grafismo en la comunidad.

El proceso de limpieza implica cubrir las pintadas con una nueva capa de pintura, restringiéndose a superficies no porosas. Antes de realizar este trabajo, se protegen las áreas circundantes para evitar manchas, y se utilizan pinturas recomendadas para exteriores, aplicadas en dos manos para que coincidan con el color original.

El personal participante también recibe equipo de protección adecuado, que incluye guantes, botas y chalecos reflectantes, así como ropa impermeable para condiciones meteorológicas adversas. Esto no solo asegura su seguridad, sino que también contribuye a una ejecución eficiente de las labores de limpieza.

La creación de patrullas antigrafitis ha sido una extensión de estas políticas de limpieza. Desde su implementación en 2022, estas unidades no solo responden a solicitudes ciudadanas para la eliminación de grafitis, sino que también realizan revisiones sistemáticas en áreas donde el vandalismo es más frecuente. En el año 2024, estas patrullas llevaron a cabo más de 42,000 intervenciones, cubriendo una superficie considerable de 379,432 metros cuadrados, lo que equivale a más de 40 veces el tamaño de la icónica plaza Mayor de Madrid.