A finales de mayo, la Policía Nacional emprendió un amplio operativo en varias localidades de la Comunidad de Madrid, logrando desmantelar redes de narcotráfico en un período de apenas 24 horas. Este golpe incluyó intervenciones en Leganés, Getafe, Parla, Usera, y los distritos de Puente y Villa de Vallecas, resultando en la detención de alrededor de veinte individuos y la clausura de hasta nueve puntos de venta de drogas.

La primera acción tuvo lugar en Leganés y Getafe y fue el resultado de investigaciones que comenzaron a principios de 2023. Las indagaciones revelaron la existencia de un clan familiar responsable de la distribución de cocaína, lo que llevó a las autoridades a identificar una efectiva estructura criminal que operaba en la zona, involucrando numerosas transacciones diarias de compradores locales.

Este grupo delictivo no solo aceptaba pagos en efectivo, sino que también contaba con herramientas para manejar el dinero de manera segura. Desde detectores de billetes falsos hasta datáfonos para pagos con tarjetas, la organización estaba bien equipada para manejar sus operaciones de manera eficiente.

El 28 de mayo, se realizaron varios registros en los domicilios de Leganés y un cuarto en Getafe, donde los policías encontraron indicios de actividad delictiva. A pesar de que algunos miembros del grupo intentaron deshacerse de la droga arrojando sustancias por las ventanas, los agentes lograron incautar una cantidad significativa de estupefacientes escondida en lugares insólitos como armarios y debajo de colchones.

El resultado de esta operación fue la incautación de cocaína, marihuana y otros narcóticos, así como varios teléfonos y más de 3.000 euros en efectivo. Un total de doce personas fueron arrestadas bajo las acusaciones de pertenencia a una organización criminal y delitos contra la salud pública. Además, siete de ellos han sido enviados a prisión por orden judicial.

Otra operación se llevó a cabo en Parla, donde se detectó un domicilio donde se realizaban ventas de drogas a cita previa. Este establecimiento funcionaba como punto de almacenamiento y preparación de sustancias, y su encargado utilizaba medidas de seguridad extensivas para evadir la acción policial.

El 27 de mayo, se registró la vivienda, resultando en la incautación de diversas drogas incluyendo cocaína y hachís, así como 1.800 euros en efectivo y un móvil que había sido robado. El individuo responsable ha sido acusado de delitos contra la salud pública y el patrimonio y también se encuentra bajo custodia policial.

En Usera, la Policía Nacional también llevó a cabo dos operaciones recientes. La primera, iniciada en diciembre de 2024, culminó en un registro donde se encontraron drogas, armas blancas y dinero en efectivo. Tres personas fueron arrestadas bajo acusaciones de delitos relacionados con narcotráfico.

La segunda acción en Usera se desarrolló a finales de mayo con la detención de un hombre en posesión de cocaína y heroína, en lo que se considera otro golpe significativo a la venta de drogas en la zona.

Finalmente, en Puente y Villa de Vallecas, la Policía realizó registros en domicilios relacionados con el tráfico de drogas, donde se confiscó una cantidad considerable de cocaína, dinero en efectivo y diversas armas. En uno de los casos, la colaboración de vecinos permitió alertar a las autoridades sobre la actividad sospechosa que se llevaba a cabo en un vecindario cercano a escuelas y parques, implicando a dos individuos a pesar de la presencia de sus hijos en el hogar.

Además, se interceptó a un conductor en Villa de Vallecas, quien mostraba un comportamiento inusual al manejar a baja velocidad. Tras un registro exhaustivo, se encontraron dos kilos de cocaína en su vehículo, lo que resultó en su detención por un presunto delito contra la salud pública.