En un contundente pronunciamiento, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha manifestado este viernes su inquebrantable oposición a cualquier tipo de alianza con el independentismo. Califica a este fenómeno como un verdadero "cáncer de España", tras el anuncio por parte del Partido Popular sobre su intención de votar a favor del nuevo decreto ómnibus del Gobierno, que ha sido acordado con Junts y que incluye la controvertida cuestión del palacete en París del PNV.

Desde Valdemorillo, donde se dirigía a los medios de comunicación, Díaz Ayuso ha dejado claro que "con el nacionalismo, ni a la vuelta de la esquina". A su juicio, este movimiento es responsable de las problemáticas que enfrenta el país y ha afirmado que "está causando todo el destrozo institucional, económico y social que está viviendo España". Sus palabras reflejan una profunda preocupación por las implicaciones que el nacionalismo tiene en la cohesión nacional.

Asimismo, la dirigente autonómica ha hecho hincapié en que los nacionalistas “odian a España” y que, a su parecer, su única intención es “hacer daño” al conjunto de la nación. Este discurso subraya su convicción de que estos elementos están “carcomiendo” la vida pública, así como las instituciones y la cotidianidad de los ciudadanos españoles.

En relación al decreto mencionado, Díaz Ayuso ha admitido no conocer "la letra pequeña", pero ha lanzado críticas virulentas hacia un gobierno que, según ella, “secuestra la voluntad” de los ciudadanos que asegura representar. Señaló que la forma en la que se presentan estos decretos, mezclando diferentes temas, es problemático y desvirtúa el importante debate que cada uno de ellos debería suscitar. A su juicio, cuestiones como las pensiones y las ayudas por desastres naturales son materia demasiado distinta como para ser tratadas de manera indistinta. Con firmeza, ha afirmado que este tipo de situaciones son producto de tener "el Gobierno más débil de la democracia", atrapado por las exigencias de los nacionalistas.