El cantante dominicano Henry Méndez ha dado a conocer un comunicado en el que expone su postura tras las críticas recibidas por un comentario que realizó durante un concierto reciente. Asegura que no alberga "odio ni rencor" hacia ninguna persona y ofrece disculpas por su declaración en la que expresó que "odia a los rojos". En su defensa, señala que su intención era detener los cánticos negativos hacia el presidente Pedro Sánchez.

El revuelo ocasionado ha llevado al Ayuntamiento de Madrid a confirmar que el concierto programado en Villa de Vallecas para el próximo 13 de septiembre se llevará a cabo, desestimando la solicitud del PSOE de cancelarlo debido a las palabras de Méndez.

En su mensaje compartido en la red social X, el artista enfatiza que no guarda "odio ni rencor" hacia nadie, sin importar su color de piel, religión, orientación sexual, ideología o nacionalidad. Este punto es fundamental en su intento de esclarecer la situación.

Méndez profundiza en su defensa al explicar que su verdadero objetivo era detener los cánticos que, a su juicio, transmiten odio hacia el presidente del país. Para él, este tipo de expresiones son inaceptables y carecen de respeto, independientemente de su contenido político.

Asimismo, el cantante ha extendido sus disculpas a aquellos que se sintieron ofendidos por su comentario, reconociendo que hizo referencia a un color que está estrechamente asociado con determinadas ideologías políticas.

No obstante, el artista también señala que el vídeo en cuestión no ha sido presentado en su totalidad, y que solo se ha difundido el fragmento en el que, afectado por la situación, se expresó de manera desafortunada.

En su cierre, Méndez resalta que España es un país que respira libertad y diversidad y que, en consecuencia, es crucial mantener una discusión basada en el respeto mutuo y la ética, valorando la libertad de expresión y las diferentes perspectivas.

Para finalizar, el cantante reafirma su compromiso social, mencionando que su propósito siempre ha sido transmitir emociones y conectar con su audiencia. "¡Viva la música!", concluye su mensaje, apostando por el poder unificador de esta expresión artística.