Crónica Madrid.

Crónica Madrid.

Cobo aboga por una "humanidad iluminada" durante la misa en honor al Papa Francisco en Madrid.

Cobo aboga por una

Durante una emotiva misa funeral en la Catedral de la Almudena de Madrid, el cardenal José Cobo destacó la significativa contribución del Papa Francisco a la humanidad, resaltando su papel en la purificación del Evangelio de las ideologías que a menudo enturbian su mensaje genuino. Este homenaje se llevó a cabo en un contexto inusual, ya que un apagón afectó a gran parte de España un día antes, simbolizando las "oscuridades" que a menudo enfrentamos en la vida.

Cobo, en su discurso, subrayó que el amor debe ser la base de nuestra convivencia, no solo en la vida cotidiana, sino también en el ámbito político. "El amor verdadero es el que perdura y da forma a nuestra Iglesia", declaró el cardenal, señalando que esta es la esencia que queda después de las adversidades, una llamativa reflexión en un día lleno de desafíos.

El cardenal abrió la ceremonia agradeciendo la presencia de diversas personalidades, incluido el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, y otros representantes de la Comunidad de Madrid. Cobo describió el día como "complicado" debido a la falta de luz, pero reconfortado por la "luz sencilla y humilde de nuestros corazones", que proviene de la luz del Resucitado.

Durante su homilía, Cobo hizo un llamado a la congregación para reflexionar sobre su camino en un mundo repleto de "apagones". "Este es el momento perfecto para pararnos y pensar en el lugar que ocupa Dios en nuestras vidas", afirmó el arzobispo, instando a una introspección colectiva sobre la espiritualidad y el propósito.

El legado del Papa Francisco también fue un tema central de su mensaje. Cobo enfatizó que la labor del Pontífice consistió en liberar el Evangelio de las interpretaciones ideológicas, permitiendo que su verdadero poder y sencillez resplandezcan. "Su legado nos invita a mirar al mundo a través de la auténtica mirada del Evangelio", argumentó.

El cardenal recordó cómo, al ser conocido por su cercanía con los más necesitados y su construcción de puentes de paz, Francisco fue mucho más que un líder eclesiástico. "Era un testigo de lo invisible en un mundo materialista", afirmó Cobo con evidente admiración.

Cobo también destacó que el Papa valientemente defendió la apertura de la Iglesia como un hogar inclusivo para todos, instando a sus feligreses a no encerrarse en la comodidad de las sacristías, sino a salir al encuentro de los que sufren y están marginados. "Así era Francisco, un hombre guiado por el Espíritu, abriendo caminos hacia los demás", recalcó el arzobispo.

Finalmente, Cobo reflexionó sobre la fragilidad de la condición humana, recordando cómo Francisco, incluso en su enfermedad, siguió llevando la cruz por los más vulnerables, simbolizando un amor de Dios sin condiciones. "Su vida fue un recordatorio de que, en medio de la deshumanización, la espiritualidad y la compasión deben prevalecer", cerró su conmovedora alocución.

La misa, repleta de fieles, inició a las 19:00 horas y se extendió hasta las 20:15 horas, añadiendo un toque especial con la participación de la escolanía del Valle de los Caídos, mientras la comunidad se unía en un tributo a un líder que dejó una huella indeleble en la historia de la Iglesia.