La presidenta madrileña critica con dureza el contexto político actual

Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, ha expresado este jueves su firme apoyo a la iniciativa del Partido Popular (PP) de vetar a la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, en el ámbito europeo. Según su postura, el reciente conflicto en Valencia no justifica que se premie a ningún político en estas circunstancias. Para Ayuso, es vital mantener una perspectiva pragmática y evitar el autoelogio por parte de los políticos.

Durante la sesión de control en el Pleno de la Asamblea de Madrid, la presidenta madrileña hizo hincapié en la necesidad de que los políticos actúen con los pies en la tierra. "Hay que tener un ego y hay que estar realmente despegado para encima ir a ponerse medallas en ningún sitio. Apoyo 100% a Alberto Núñez Feijóo y apoyo 100% que Europa vete a esta mujer", manifestó, rechazando cualquier intento de reconocimiento en un contexto tan marcado por las tensiones políticas actuales.

Ayuso argumentó que España está atravesando un "drama" al estar, según su perspectiva, "secuestrada por una banda" que actúa al margen de la ley, creyendo que puede operar sin rendir cuentas. En su opinión, esta situación constituye una forma de corrupción que contraviene principios democráticos fundamentales, ya que los acuerdos alcanzados no se reflejan en programas políticos legitimados por el electorado.

En un tono incisivo, cuestionó si las decisiones recientes, como la amnistía a ciertos delitos, la liberación de etarras y condenados por el caso de los ERE de Andalucía, formaban parte de algún programa electoral. "¿Y cargarse el buen nombre de todas las instituciones, hasta EFE, que han sido capaces de dar por muerto a una persona que está viva?", se preguntó, planteando serias dudas sobre la legitimidad de las acciones políticas recientes.

La presidenta de la Comunidad de Madrid también hizo alusión a lo que calificó como "favores" que se devuelven en el Congreso de los Diputados, aludiendo a una supuesta alianza con la extrema izquierda en favor de intereses particulares. Asimismo, lanzó una crítica a la frase, que atribuyó al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la que afirma que "gobernaremos con o sin Parlamento". Esta declaración, según Ayuso, será una carga para Sánchez a lo largo de su carrera política.

Por su parte, el portavoz del PSOE, Juan Lobato, había defendido previamente la posición de la presidenta de la Generalitat, Carlos Mazón, y criticado a Ayuso por su negativa a apoyar la candidatura de Feijóo para evitar que Teresa Ribera asuma un cargo en la Comisión Europea. Lobato argumentó que el debilitamiento de la democracia provoca un daño directo a los ciudadanos, y que la polarización y la radicalidad son un peligro constante para el sistema democrático.

El socialista insistió en que la democracia es un pilar fundamental que debe ser preservado y que, a pesar de las diferencias políticas, es esencial que los líderes promuevan la justicia social y el acceso a oportunidades educativas, refiriéndose a la necesidad de incrementar las plazas en universidades públicas. "Eso, señora Ayuso, aunque a usted no le guste, es justicia social", enfatizó, instando a la presidenta a abandonar el enfoque polarizador que, en su opinión, está caracterizando su gestión.