En Madrid, el 14 de octubre, emerge una controversia dentro de Más Madrid, un partido que se autodenomina como alternativa política en la comunidad. Manuela Bergerot, portavoz del grupo en la Asamblea, ha criticado abiertamente a Emilio Delgado, su portavoz adjunto y líder local en Móstoles, quien expresó su aspiración de dirigir el partido en el futuro. Esto ocurrió en un momento delicado, ya que su compañera de bancada, Jimena González, estaba siendo retenida en Israel como parte de una misión humanitaria en Gaza.

En declaraciones a Onda Madrid, Bergerot manifestó que la ambición de Delgado no era oportuna, especialmente dado el sufrimiento colectivo que se experimentaba en ese momento. Su comentario surge en el contexto de la creciente tensión interna dentro del partido, que ha saltado a las portadas de varios medios de comunicación.

La semana pasada, Delgado había articulado su deseo de ser el líder de Más Madrid, indicativo de su intención de desafiar a la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso. En entrevistas, el político mencionó que esta posibilidad le "gustaría" y que estaba considerando su futura carrera política, destacando que sería la militancia quien finalmente decidiría su destino dentro del partido.

La situación se volvió aún más crítica el miércoles, cuando los miembros del partido estaban en un estado de inquietud mientras González se encontraba en una situación precaria con otros voluntarios que intentaban ayudar en la Franja de Gaza. La angustia era palpable entre los líderes y militantes de Más Madrid, quienes intentaban comunicarse con el Ministerio de Asuntos Exteriores y las familias de los involucrados para coordinar una respuesta adecuada.

Bergerot subrayó que, mientras se lidiaba con esta crisis, Más Madrid centraba sus esfuerzos en liderar con eficacia. Afirmó que el partido se comprometía a demostrar que podía gestionar la situación con profesionalismo y responsabilidad desde el ámbito de Sanidad y otros gobiernos locales, reiterando que hay una alternativa viable y efectiva para mejorar la vida de los madrileños y demostrar que se puede liderar con mayor eficacia en la región.