En una comparecencia ante el juez, la portavoz del Grupo Municipal Socialista en Madrid, Reyes Maroto, ha aclarado que en sus recientes declaraciones sobre el manejo de las residencias durante la crisis sanitaria, no tuvo la intención de imputar a nadie con asesinatos. Esta aclaración se produce en un contexto de creciente controversia y tensión política en la región.

Maroto fue llamada a testificar por un presunto delito de calumnias debido a sus afirmaciones de que se produjeron “personas mayores asesinadas” en las residencias madrileñas, a causa de un protocolo implementado por el Gobierno regional que, según ella, impidió la derivación adecuada de los pacientes a hospitales durante la pandemia.

Según informantes cercanos a la socialista, Maroto enfatizó que sus comentarios realizados el 13 de marzo de 2025 estaban dirigidos exclusivamente a criticar la gestión del Gobierno de la Comunidad de Madrid, en su papel como portavoz del PSOE y en un marco “estrictamente político”, sin intención de atacar la imagen personal de la presidenta Isabel Díaz Ayuso.

El Juzgado de Instrucción número 13 de Madrid admitió la demanda que la Comunidad de Madrid presentó contra Maroto, argumentando que ella no cambió su postura durante un acto de conciliación llevado a cabo en junio, lo que ha alimentado las tensiones entre las instituciones locales y el partido socialista.

Las mismas fuentes subrayan que Maroto ya había “aclarado” sus palabras en un comunicado enviado a los medios el 14 de marzo de 2025, el cual recibió una considerable cobertura en la prensa, con el objetivo de asegurar que se entendieran sus intenciones originales y el contexto político de sus declaraciones.