Sindicatos de Renfe y Adif rechazan traspaso de Rodalies y se oponen a la segregación.
MADRID, 8 Nov. - Los comités de empresa de Renfe y Adif han aclarado que la huelga de cinco jornadas en ambas empresas no se ha convocado contra el traspaso de los servicios a Cataluña, sino contra la posible segregación de Renfe y Adif en distintas empresas más pequeñas.
Según los sindicatos, lo que les preocupa no es quién gestione el servicio, sino el riesgo de bifurcar dos de las mayores empresas públicas del país y comprometer las garantías laborales de los trabajadores.
Una de las propuestas para satisfacer a los representantes de los trabajadores es crear una nueva empresa dependiente de la Generalitat que se encargue de gestionar los servicios, mientras que Adif y Renfe seguirían siendo las encargadas de prestarlos. De esta forma, los trabajadores continuarían perteneciendo a estas empresas públicas y mantendrían sus condiciones actuales, mientras que la Generalitat tendría control sobre el servicio, los trenes y las vías.
Los sindicatos han explicado en una rueda de prensa que alrededor de 2.300 personas en Renfe y 1.500 en Adif podrían verse afectadas, dependiendo de la magnitud del traspaso de competencias.
En cuanto a la posible desconvocatoria de la huelga, los sindicatos afirman que los paros son una forma de presión y no un fin en sí mismo. Esperan que se abra una mesa de negociación y se llegue a acuerdos que satisfagan las demandas de los trabajadores.
El problema radica en que el traspaso de Rodalies es solo un acuerdo político entre el PSOE y ERC que podría no materializarse en caso de no alcanzarse un pacto de investidura. Por esta razón, el Ministerio de Transportes aún no ha podido estudiar los detalles de la operación.
No obstante, los sindicatos ya han anunciado su intención de convocar huelga los días 24 y 30 de noviembre y 1, 4 y 5 de diciembre. Hasta el momento, el Ministerio no ha respondido a la petición de reunión por parte de los comités.