El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, tuvo el honor de recibir al Rayo Vallecano en el Palacio de Cibeles, celebrando un momento que quedará grabado en la historia del club. Este encuentro se produjo tras la emocionante clasificación del equipo para la Conference League 2025-26, un logro que marca su segunda aparición en competiciones europeas a lo largo de su trayectoria.

En esta emotiva ceremonia, el primer edil estuvo acompañado por destacados miembros del Ayuntamiento, entre ellos la vicealcaldesa Inma Sanz y la delegada de Cultura, Turismo y Deporte, Marta Rivera de la Cruz. También se sumaron la concejala delegada de Deporte, Sonia Cea, y los concejales de los distritos de Villa de Vallecas y Puente de Vallecas, Ángel Niño y Carlos González Pereira, quienes compartieron la alegría de este logro deportivo.

Durante su intervención, Almeida no escatimó en elogios hacia los jugadores, la dirección del club y su equipo de entrenamiento, calificando este acontecimiento como un “hito histórico” en la vida del Rayo Vallecano. Resaltó que este año es particularmente especial, ya que coincide con el centenario del club y la primera vez que acceden a competiciones europeas gracias a su propio esfuerzo y méritos deportivos.

El alcalde subrayó que el Rayo Vallecano es un símbolo de esfuerzo y sacrificio que representa a un barrio entero, por lo que su éxito resuena profundamente en Madrid. "Vuestra llegada a Europa ha traído una gran alegría a nuestra ciudad esta temporada", declaró orgulloso Almeida.

El equipo, liderado por el presidente Raúl Martín Presa y los capitanes Óscar Valentín e Isi Palazón, sorprendió al alcalde con un regalo significativo: una camiseta personalizada con el nombre de Lucas, en honor al futuro hijo de Almeida, lo que añade un toque personal a este memorable encuentro.

Fundado el 29 de mayo de 1924, el Rayo Vallecano ha vivido intensas temporadas en la Primera y Segunda División. Su última experiencia en una competición europea fue hace más de dos décadas, en la temporada 2000-2001, cuando recibió una invitación para participar en la Copa de la UEFA debido a su juego limpio, un testimonio de la evolución y el compromiso del club a lo largo de los años.