En una noche agitada en los distritos de Usera y Villaverde de Madrid, la Policía Nacional ha logrado detener a tres individuos luego de una persecución que incluyó disparos al aire y un intento de atropello a un agente. Según un portavoz de la Jefatura Superior de la Policía de Madrid, los elementos violentos involucrados en el incidente fueron importantes.
La acción comenzó cuando un coche de Policía Nacional camuflado detuvo un vehículo Jaguar en la calle Corindón, en el barrio de San Fermín. En lugar de detenerse como se esperaba, los ocupantes del vehículo aceleraron y trataron de atropellar a un agente, quien se vio obligado a efectuar varios disparos al aire para defenderse.
A partir de este punto, se desencadenó una persecución policial, con la colaboración de otras patrullas, que culminó en la intercepción del vehículo en la calle Eduardo Barreiros de Villaverde. Durante la detención, los individuos chocaron contra otros coches antes de bajarse del Jaguar y tratar de escapar a pie, siendo finalmente capturados.
El conductor del vehículo tenía una orden de arresto pendiente por delitos graves, incluyendo daños, lesiones relacionadas con la seguridad vial y atentado a agentes de la autoridad. Por su parte, los otros dos ocupantes fueron arrestados por atentado y desobediencia a la autoridad, siendo jóvenes de entre 24 y 30 años.
Como resultado de la violenta confrontación, un agente sufrió golpes en la cadera y en el codo al ser casi atropellado, mientras que otro policía estuvo a punto de ser agredido durante la detención de uno de los individuos. Afortunadamente, ambos agentes resultaron heridos levemente, según informaron fuentes policiales a Europa Press.
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