Se abrirá un segundo centro regional de crisis las 24 horas para víctimas de violencia sexual a fin de año.
La Comunidad de Madrid ha informado que abrirá un segundo centro regional de crisis 24 horas para casos de violencia sexual a finales de este año y ha aprobado una inversión autonómica de 5,4 millones de euros en atención especializada para mujeres víctimas de violencia. Esto ha sido anunciado por el Consejo de Gobierno en funciones de la Comunidad de Madrid esta semana.
El primer contrato es para garantizar el funcionamiento de los centros residenciales 4 y 5 para jóvenes de entre 18 y 25 años que han sufrido violencia contra la mujer y están en riesgo de exclusión social. Asciende a 1,8 millones y tendrá una duración de dos años. Los centros cuentan con 22 plazas y ofrecen alojamiento, manutención y la provisión de artículos de menaje o higiene, así como una intervención individualizada para proporcionar apoyo para la adquisición o recuperación de habilidades sociales o personales, atención psicológica y acompañamiento en los procesos de inclusión sociolaboral.
Además, se ha autorizado la celebración del contrato de gestión del segundo Centro de Crisis 24 Horas de la región, que se sumará al ya existente a finales de año. Este recurso está dirigido a mujeres mayores de edad que hayan sufrido agresión, abuso, acoso o cualquier tipo de violencia sexual, independientemente de que hayan interpuesto denuncia o no. La atención se extiende también a los hijos menores de edad y familiares dependientes de la usuaria, e incluirá ocho plazas residenciales, acompañamiento e información telefónica y presencial las 24 horas del día, entre otros servicios. En este caso, la inversión es de 3 millones para una duración de dos años.
Por último, se ha prorrogado durante un año la gestión del Centro de Atención Integral a mujeres víctimas de violencia sexual de la Comunidad de Madrid (CIMASCAM) con una inversión de 513.247 euros. Este recurso ofrece servicios de información y orientación, tanto telefónica como presencial, para asistir y orientar a las usuarias y, en su caso, a los familiares, sobre las consecuencias y efectos de la violencia sexual sobre la persona y su entorno.