La víctima, que presentaba múltiples hematomas, estaba en un inmueble con ventanas tapadas y puertas cerradas con candados

MADRID, 15 Feb.

Agentes de la Policía Nacional han liberado a una mujer que llevaba retenida desde hacía 4 días por su expareja en una casa del vecindario madrileño de Barajas con múltiples ventanas tapadas y 2 puertas cerradas con candados.

La hermana de la víctima, que llevaba múltiples días sin comprender de ella, fue la que alertó a la Policía, puesto que tenía conocimiento de la situación de pésimos tratos que se encontraba viviendo, según informó la Jefatura Superior de Policía.

En entre las habitaciones del inmueble, los policías encontraron a la víctima, que se encontraba encerrada en estado de nerviosismo y presentaba hematomas por diferentes unas partes del cuerpo.

La investigación se inició en el momento en que un agente de la Policía Local de Candeleda (Ávila) contactó con el CIMACC 091 para reportar de que una víctima de crueldad de género podría estar siendo retenida en una casa de Madrid, todo ello una vez que la voz de alarma la hubiese dado la hermana de la víctima, habitante en el extranjero, quien tras no poder entrar en contacto con ella y al tener conocimiento de la orden de alejamiento que existía, decidió ofrecer aviso a la Policía.

Los agentes de Policía Nacional consiguieron una dirección aproximada del rincón donde podría situarse la vivienda y han comenzado la búsqueda en una región de bien difícil ingreso. Finalmente hallaron, en un callejón sin salida, un inmueble que supuestamente se encontraba descuidado, con ventanas tapadas, pero que presentaba ciertos signos de estar habitado.

Tras llamar en reiteradas ocasiones y no recibir contestación, los agentes escucharon ruidos que procedían del interior, tras lo que abrió la puerta un varón que reconoció haber mantenido una relación sentimental con la mujer que estaban intentando encontrar, más allá de que aseguró que llevaba mucho más de un mes sin comprender de ella.

Sus cuentos contradictorios y la presencia de 2 puertas cerradas con candados llamó la atención de los agentes, que frente a un suave estruendos que viene de una de esas habitaciones sospecharon que podría haber alguien dentro suyo.

Finalmente lograron revisar que tenía que ver con su expareja, a la que hallaron claramente modificada y con hematomas en la cara. La víctima estaba asustada, con lo que pese a percibir a los policías en el pasillo, no solicitó auxilio por temor a las probables represalias de su expareja.

Tras su liberación, llevada a cabo en menos de una hora desde el instante en que se recibió el aviso, la mujer fue asistida por los servicios de urgencia gracias a las lesiones que presentaba, al paso que el varón fue detenido como presunto creador de los delitos de pésimos tratos, quebrantamiento como condena y un delito de detención ilegal pasando más tarde predisposición judicial.