MADRID, 8 Sep.
La dueña del bar de Carabanchel que fue incendiado y padeció una explosión la madrugada del martes ha aportado a la Policía Nacional las demandas interpuestas en los últimos meses contra la expareja de una de sus usadas por amenazas y daños al local, han informado a Europa Press fuentes cercanas al caso.
La explosión que asoló el bar 'La oficina 28', ubicado en la calle Cuevas de Altamira, se saldó con una mujer de 23 años, Daniela, herida muy grave que al final murió ayer al tener el 90% de su cuerpo quemado. También resultó herido su pareja, Tito, de 19 años, quien está detenido por supones de haber causado la deflagración. De hecho, hay imágenes y un bidón de gasolina que les implica.
La Policía inspecciona múltiples hipótesis de los hechos, entre ellas si la dueña encargó a estos jóvenes que se deshicieran del local para cobrar el seguro, una versión que apoya el hermano de Daniela, quien afirma que la dueña pasaba una aceptable racha y había contado más de una vez que habría que aprender fuego al local. Pero ella asegura que no ha gestionado ningún cobro del seguro y ni ha incrementado la prima.
La otra hipótesis es que tras el fuego esté una tercera persona, José Antonio, la expareja de una usada, como venganza laboral contra la dueña. En un principio asimismo se valoró la oportunidad de riñas entre la fallecida y la dueña. Pero esta última afirma que su relación era buena.
Para descartar el móvil inteligente económico, la dueña del lugar ha aportado a los agentes las cinco demandas interpuestas contra el exnovio de la usada por amenazas. Al parecer, habría lanzado piedras al local e inclusive llegó a incrustrar su turismo contra exactamente el mismo.