Este fin de semana se llevará a cabo el cambio de hora en toda la Unión Europea, comenzando el horario de verano el domingo 31 de marzo a las 02:00, momento en que los relojes se adelantarán una hora. Este cambio se mantendrá hasta el último fin de semana de octubre, cuando se volverá al horario de invierno.

La Directiva Europea 2000/84/CE establece este cambio de hora en todos los países miembros de la Unión Europea, y por el momento no se prevé su eliminación a pesar de debates previos sobre el tema en legislaturas anteriores.

El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) señala que los ahorros derivados de este cambio de hora son marginales y no están garantizados para todos los estados miembros. Aunque se pueden ahorrar energía en iluminación, el impacto en la calefacción es menos evidente e incluso podría aumentar el consumo.

En España, el IDAE indica que los estudios sobre el cambio de hora necesitan ser evaluados a lo largo del tiempo para comprender su verdadero impacto, considerando nuevos factores como la eficiencia energética en iluminación y la introducción de hábitos como el teletrabajo.

La discusión sobre la eliminación del cambio de hora en la Unión Europea ha estado presente desde 2018, cuando la Comisión Europea realizó una consulta pública que mostró el apoyo mayoritario a acabar con esta práctica.

En España, el cambio de hora seguirá llevándose a cabo al menos hasta 2026, con modificaciones cada año en marzo y octubre. La decisión final sobre la posible eliminación de este cambio horario sigue pendiente de acuerdo entre el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión.