El presidente de la Confederación Empresarial de Madrid-CEIM (CEOE), Miguel Garrido, ha expresado su crítica hacia los pactos para la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno, mencionando la pérdida de calidad democrática y el mensaje negativo a los inversores. Además, Garrido ha señalado que el tejido empresarial español está preocupado por las consecuencias de este acuerdo, ya que pueden ser muy negativas.
Uno de los puntos que ha generado controversia es la propuesta de Junts de sancionar a las empresas que tengan su sede fuera de Cataluña. Garrido considera esto como un ataque frontal a la libertad y recalca que las empresas abandonaron Cataluña debido a la falta de seguridad y la enorme desconfianza que prevalecía en la región.
El presidente de la patronal madrileña afirma que no se puede penalizar a una empresa por tomar decisiones dentro de su libertad, cumpliendo las leyes, sobre dónde y cómo llevar a cabo su actividad. Además, advierte que mediante amenazas, las empresas no solo no regresarán, sino que probablemente seguirán dejando Cataluña.
En cuanto a la reunión extraordinaria y de urgencia celebrada por la CEOE, Garrido señala que es habitual que el comité ejecutivo se reúna antes de tomar un posicionamiento público y añade que no le consta una división expresa en Foment del Treball, la patronal catalana.
En relación al funcionamiento del mercado laboral en España, Garrido critica su falta de eficacia y propone tomar medidas para solucionarlo, incluyendo una mayor flexibilidad. También menciona la necesidad de vincular las ayudas a la búsqueda activa de empleo y la formación de las personas desempleadas, con el objetivo de reintegrarlas al mercado laboral.