MADRID, 5 Mar.

El Retiro acoge desde el mes de enero enero tres ejemplares de búho real, asimismo popular como enorme duque, que podrían seguir de El Pardo, donde abunda esta clase.

El búho real se considera la rapaz nocturna mucho más grande de la fauna europea tanto por su corpulencia como por sus capaces garras y su grande cabeza, rematada por largas 'orejas' y donde destacan sus interesantes ojos anaranjados.

Se trata de un ave primordialmente noctámbula, que despliega su actividad a lo largo de las primeras horas tras el atardecer y las últimas horas antes del amanecer. Los búhos reales son muy sedentarios y comunmente sostienen su actividad en un solo territorio a lo largo de su intérvalo de tiempo adulto.

Los jardines del Buen Retiro se convirtieron en la vivienda de una pareja de esta grandiosa ave rapaz y de un tercer ejemplar que se dejó oír en el ambiente del parque, han informado desde el Ayuntamiento de la ciudad más importante en un aviso.

Desde el Consistorio han correcto que su llegada al centro de la ciudad más importante "no ha debido ser labor simple" y hizo hincapié en que han encontrado en El Retiro "un ecosistema conveniente que les da las mejores condiciones para transformarlo en su casa para desarrollar su historia adulta".

La novedad sorprendió a los especialistas, los propios profesionales municipales, vecinos y visitantes. De hecho, desde su avistamiento, varios madrileños, especialistas, curiosos y apasionados a la ornitología se han acercado al parque para ver, fotografiar y oír los cantos de estos animales.

Por su parte, el directivo de Parques y Viveros, Santiago Soria, ha considerado que el sitio desde el que llegaron fué El Pardo, donde la existencia de esta clase es abundante. "Posiblemente hayan sido alejados por el hecho de que hay varios ejemplares allí y no hay espacio ni alimento para todos. Además, con la pandemia, muchas especies se han movido a zonas urbanas para subsistir", ha proclamado el responsable municipal.

Desde el Ayuntamiento han complacido la colaboración de los ciudadanos a fin de que el ambiente en el que están las aves no se vea perturbado y se logre asegurar la permanencia y viable cría de los recientes vecinos de la ciudad más importante.