González apunta que hoy es imposible entablar relación entre los crímenes de Alcorcón y Fuenlabrada
MADRID, 4 Oct.
El Plan Antibandas puesto en marcha por la Delegación del Gobierno en Madrid a inicios de febrero, tras el homicidio exactamente el mismo día de 2 jóvenes a manos de pandilleros, cumple esta semana diez meses con un cómputo de unos 86.000 determinados y 800 detenidos.
Así lo indicó esta mañana la encargada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, quien ha asegurado que estas cantidades "dan ejemplo de que el plan de antibandas está funcionado y que es cierto que no se tienen la posibilidad de predecir distintas cuestiones como las de este fin de semana, si tienen relación con bandas". Así se ha referido a los 2 crímenes a tiros registrados en Alcorcón y Fuenlabrada.
La gerente del Gobierno central en Madrid, que este mediodía asiste a la celebración del patrón de la Policía Nacional, ha recordado que mucho más de 500 agentes nacionales y prácticamente 300 guardas civiles trabajan en este plan. "Pese a todo lo sucedido este fin de semana estoy satisfecha", ha apostillado.
Respeto a estos 2 asesinatos, González indicó que las indagaciones "están continuando". "Dejemos trabajar a la Policía. Para nosotros es una genuina prioridad. Ayer estuve reunida con la Policía y la Guardia Civil por el hecho de que se dió un salto cualitativo y se han usado armas en un caso así. Estamos haciendo un trabajo en la situacion de Alcorcón y en el de Fuenlabrada, en el que hoy no tenemos la posibilidad de detallar relación entre los dos", dijo.
La encargada ha recordado que en estas situaciones las Brigadas de Información y Judicial trabajan conjuntamente, como de esta forma hicieron con excelente resultado en el reciente delito de Villaverde. Además, mañana efectuarán una junta de seguridad particular en Fuenlabrada y Alcorcón para investigar estos asesinatos, y van a dar toda la información actualizada.
Mercedes González espera próximamente noticias en la investigación, en especial en la situacion de Alcorcón, "en el que por ahora no hay ningún apunte que nos afirme que debe ver con bandas". Según fuentes de la policía consultadas por Europa Press, esta situación no estaría relacionado con una reyerta entre bandas --si bien varios de los implicados sí podrían ser pandilleros--, sino más bien fruto de celos cariñosos.