MADRID, 26 Dic.
Últimos días del año, instante de llevar a cabo cómputo de un año de alta intensidad informativa madrileña.
Fotografía: Alberto Ortega/EP
El rey Gaspar centró todas y cada una de las miradas en la Cabalgata de Reyes Magos de la ciudad más importante que recobraba la normalidad tras las festejadas en 2020 y 2021 a raíz del coronavirus. Hadas, duendes y otros elementos fabulosos alimentaron la llegada de Sus Majestades de Oriente a Madrid en una noche mágica del 5 de enero donde el monarca Gaspar, ayudado por el actor Beltrán Iraburu, llegó a ser entre las personalidades mucho más mentadas en las comunidades, en las que varios clientes manifestaban que este era en este momento su rey mago preferido.
Fotografía: Fernando Sánchez /EP
La guerra enterrada que encaraba a Casado y Ayuso desde hacía meses, entre otros muchos fundamentos por el liderazgo del PP de Madrid, brincó por los aires en el mes de febrero. Fue ahí en el momento en que la presidenta le acusó públicamente de filtrar aclaraciones sobre la irregularidad de un contrato público con una compañía con la que trabajaba su hermano. Una manifestación en pos de la jefe del Ejecutivo madrileño a las puertas de Génova y la conjura de los barones, terminó por precipitar la marcha del líder que abrió las puertas de Génova al gallego Alberto Núñez Feijóo y fortaleció la situación de Ayuso en el partido.
Fotografía: EP
El 'caso máscaras' destapó el mes pasado de marzo que la Fiscalía Anticorrupción estudiaba desde finales de 2020 al hijo menor de Naty Abascal, Luis Medina, y a su entonces colega Alberto Luceño por embolsarse cerca de 6 millones de euros en comisiones en la venta de material sanitario al Ayuntamiento de Madrid al comienzo de la pandemia.
En abril, el juez Adolfo Carretero abrió diligencias para investigar la viable conexión de estos 2 hombres de negocios con un primo del alcalde de la ciudad más importante para entrar al Consistorio. Tras meses de pesquisas judiciales, se descartó investigar a Carlos Martínez-Almeida y a la responsable de compras del Ayuntamiento, Elena Collado.
Fotografía: Ángel Pérez Meca /EP
En el mes de abril volvimos a gozar de las sonrisas en espacios interiores tras un par de años escondes después de las máscaras. El Gobierno de Pedro Sánchez dictaminó el objetivo de su obligatoriedad, salvo contadas salvedades, desde el día 20. La Comunidad de Madrid matizó la orden de Moncloa un día siguiente con una sucesión de sugerencias sobre su empleo, primordialmente en la situacion de personas atacables (mayores de 60 años, embarazadas y también inmunodeprimidos), y sugiriendo su empleo en puntos de tránsito, estaciones y andenes relacionados con medios de transporte público en el caso de aglomeraciones, si bien la normativa estatal no contempla esta indicación.
Fotografía: Ángel Pérez Meca /EP
En mayo parpusas, rosquillas y mantos retornaron a la Pradera de San Isidro tras un par de años en los que el Covid-19 forzó a sostener distancia de seguridad con el patrón de la Villa. El actor Antonio Resines llamó a los madrileños a desempolvar sus trajes de chulapos y chulapas, a engalanar las solapas con un clavel y a recobrar la celebración mucho más tradicional de la ciudad más importante donde el chotis volvió a bailarse bien agarrado y sin máscaras por el medio.
Fotografía: Alberto Ortega /EP
A fines de junio, Madrid fue ámbito de entre los acontecimientos de mayor importancia en todo el mundo: la Cumbre de la OTAN. Más de 5.000 personas de delegaciones de sus 30 Estados de la Alianza Atlántica, tal como de otros países asociados y también convidados, visitaron la ciudad más importante, con paradas tan resaltadas como una comida oficial con los presidentes y jefes de Estado de los países convidados en el Museo del Prado. El Ministerio del Interior, con asistencia de Policía Municipal, puso en marcha entre los despliegues de seguridad más esencial de la Historia de España.
Fotografía: Alejandro M. Vélez /EP
La marea arcoíris volvió a anegar las calles de la ciudad más importante tras un par de años de limitaciones por la pandemia. La manifestación estatal en pos de los derechos de la gente LGTBI se festejó el sábado 9 de julio con la asistencia de hasta 700.000 personas según Delegación del Gobierno y 1 millón según organizadores bajo el lema 'En oposición al odio: Visibilidad, Orgullo y Resiliencia'. En esta marcha, la ministra de Igualdad, Irene Montero, aseguró que la Ley Trans y LGTBI sería "ley" antes que acabara este año 2022.
Fotografía: Fernando Sánchez /EP
Las noches tórridas marcaron el verano en la zona y agosto arrancó con una ola de calor con mínimas que no bajaron de los 25 grados. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) activó por vez primera a inicios de julio la alarma naranja por elevadas temperaturas en la Comunidad de Madrid, con máximas sobre los 40 grados.
Fotografía: Alejandro M. Vélez / EP
Al terminar el verano fueron varios los ayuntamientos y distritos que festejaron sus fiestas, este año con muchas ganas tras la pandemia. Por ello, mucho más de 5.800 policías nacionales pusieron en marcha mucho más de veinta enormes gadgets.
Los accidentes mucho más esenciales se asentaron en Alcalá de Henares, donde el penúltimo día de fiestas acabó con una guerra campal entre jóvenes y policías. Poco después, el 2 de septiembre, en San Sebastián de los Reyes, una reyerta con tiros acabó con heridos y detenidos. Ambos accidentes están relacionados con bandas juveniles violentas, un inconveniente de seguridad que se ha aumentado este año.
Y todo a pesar del esfuerzo de la Delegación del Gobierno, que puso en marcha un Plan Antibandas persistente, conformado por 500 policías y 300 guardas civiles. Este año fueron asesinados 5 jóvenes relacionados con bandas. Mientras, los agentes han detenido a 1.400 pandilleros, realizaron 110.000 identificaciones y también incautado 646 armas, únicamente una de fuego.
Fotografía: Eduardo Parra /EP
El Festival Hispanidad festejó su segunda edición este año con mucho más de 220.000 ayudantes y con particular importancia del concierto gratis del artista Camilo en la Puerta de Alcalá. En total, el Festival ofreció 130 ocupaciones de música, artes escénicas o folclore y reunió a mucho más de 1.500 artistas que proceden de 16 países.
Fotografía: Ángel Pérez Meca /EP
Noviembre acogió la que fué la manifestación mucho más tumultuaria en defensa de la Sanidad Pública en los últimos años. Miles de madrileños (670.000 según los organizadores y 200.000 según Delegación del Gobierno) colapsaron las calles del centro de la región citados por los vecinos de distritos y ayuntamientos de Madrid por un sistema sanitario "público y de calidad" y contra el gobierno "privatizador" de Isabel Díaz Ayuso que "deja fallecer la Atención Principal". En un contexto, además de esto, de huelga médica por el modelo de urgencia extrahospitalaria y días antes de los paros sin definir de médicos y pediatras en este primer nivel asistencial.
Fotografía: Jesús Hellín /EP
El año concluye con las desavenencias entre el Gobierno regional y Vox tras no llegar a un convenio de Presupuestos para 2023. El Gobierno de Díaz Ayuso deberá prorrogar las cuentas actuales desde enero al haber votado Vox contra el dictamen de Presupuestos en comisión y ratificar la Mesa de la Asamblea su rechazo desconvocando el Pleno donde iba a debatirse los días 21 y 22 de diciembre. Los de Vox consideraban que los 'populares' vejaban a sus votantes al no integrar ninguna de sus enmiendas ni necesidades.
En la ciudad más importante, Cibeles cierra el año firmando la prórroga presupuestaria --la tercera en toda su crónica, la primera de la 'era Almeida'-- al no hallar el gobierno de coalición de PP y Cs el acompañamiento de Vox. "Cordón sanitario aplicado por ellos mismos", "el Grinch de la Navidad" o ejemplo de "política inútil" son ciertas expresiones con las que Martínez-Almeida y Villacís se han referido al conjunto de Ortega Smith. Para la izquierda, la carencia de acuerdo presupuestario no es mucho más que "cálculo electoral de la derecha y de la extrema derecha".