Logró estafar a diez personas y apropiarse de material electrónico de mucho más de diez.000 euros

MADRID, 18 Jul.

Agentes de la Policía Nacional han detenido a un varón que adquiría modelos de gama alta en apps de compraventa en línea y los recogía en múltiples puntos de Madrid haciéndose pasar por un usado de correo, informó este lunes la Jefatura Superior de la Policía de Madrid en una publicación oficial.

Para ello, usurpaba presuntamente identidades de terceras personas para hacer concretes falsos en estas interfaces y, una vez acordada la venta, recogía los modelos en persona en el hogar del vendedor sin abonarlos.

La investigación empezó el mes pasado de abril tras la demanda de entre las víctimas de estos sucesos. En esta situación, tenía que ver con un varón que había brindado a la venta por medio de una app de compraventa en línea un computador portátil de gama alta.

Un usuario contactó con él y le señaló que le haría el pago del producto contra reembolso mediante una compañía de paquetería. El vendedor entregó el producto a un distribuidor que se presentó en su hogar, pero jamás recibió el dinero a cambio.

Las pesquisas policiales se dieron cuenta que existían otras nueve demandas, entre los meses de abril y junio, de víctimas que denunciaban hechos realizados a través de exactamente el mismo 'modus operandi' en distintas distritos de Madrid.

Los agentes se dieron cuenta que estas estafas podían ser cometidas por una misma persona que usurpaba la identidad de otros para darse de alta en estas apps de compraventa.

De hecho, averiguaron que estas identidades se correspondían con víctimas que antes habían sido ahora engañadas por el en este momento detenido, a quien le habrían facilitado fotografías de su documentación personal.

Una vez llegaba a un convenio con la parte vendedora, este varón, aduciendo inconvenientes con los sistemas de pago seguro de las propias apps, sugería a sus víctimas hacer la transacción contra reembolso, por medio de una compañía de paquetería externa.

Cuando acordaba este radical, él mismo, con documentos falsos, se personaba en el hogar ataviado como un mensajero y recogía el bulto, señalando a las víctimas que recibirían su dinero en el momento en que se completara el envío.

Para llevar a cabo mucho más creíble el engaño, esta persona, tras agarrar el bulto, contactaba nuevamente con su víctima haciéndole opinar que el producto no le había llegado, para después ir de a poco dilatando y, al final, interrumpiendo las comunicaciones con ella.

La utilización de distintas identidades falsas y de múltiples líneas de teléfono de contacto complicaron la indagaciones, más allá de que tras su identificación y ubicación los agentes continuaron a su detención a principios del presente mes de julio, pasando predisposición de la autoridad judicial como presunto responsable de diez delitos de estafa y usurpación de identidad, más allá de que la investigación sigue abierta frente a la oportunidad de aparición de novedosas víctimas.

En total, los estudiosos le atribuyen la apropiación de material electrónico por un valor de mucho más de diez.000 euros, resaltando entre sus compras 2 ordenadores portátiles, tres cámaras fotográficas y 4 teléfonos móviles inteligentes.