Crónica Madrid.

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Denuncian en comisaría el cierre de accesos a los puestos del Mercado de Torrijos por una socimi

Denuncian en comisaría el cierre de accesos a los puestos del Mercado de Torrijos por una socimi

Los comerciantes del Mercado de Torrijos en Madrid han presentado una denuncia ante la policía y en el juzgado de guardia después de que se tapiaran los accesos a cuatro puestos por parte de una socimi. Estos comerciantes, conocidos como 'Últimos de Torrijos', afirman que son los legítimos propietarios de los puestos y consideran que el tapiado es ilegal y una apropiación indebida de su negocio. La socimi Numulae, responsable de las obras en la planta superior, ya ha comenzado las obras.

Según los comerciantes, esta mañana se encontraron con que los accesos a cuatro puestos de la parte superior del edificio estaban tapiados. Además, en el acceso inferior, miembros de seguridad contratados por Numulae les impedían el acceso al recinto. A pesar de tener los puestos cargados de mercancía para las fiestas navideñas, no pudieron abrir. Por lo tanto, los comerciantes se vieron obligados a llamar a la policía y contar con la asistencia de su abogado.

Los mismos comerciantes han explicado que la socimi les comunicó de manera inesperada, a través de un burofax, el comienzo de las obras esta semana. Consideran que estas obras son un intento definitivo para lograr que las instalaciones queden libres y así llevar a cabo su proyecto empresarial en una ubicación atractiva en el distrito de Salamanca. La socimi ha ofrecido a los comerciantes una reubicación en la planta baja junto a otros cuatro propietarios que aún resisten en sus tiendas. Sin embargo, los comerciantes consideran que estos espacios son inservibles y supondrían un robo para sus tiendas.

Ante este conflicto, los comerciantes y los vecinos del mercado han pedido al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, que intervenga para resolver esta situación de "acoso inmobiliario" que sufren. Según ellos, la socimi ha obtenido el control del mercado de forma ilegal y los comerciantes se sienten presionados para vender sus puestos a un precio muy bajo.

En un manifiesto, los comerciantes piden al Ayuntamiento de Madrid que medie en el conflicto ya que consideran que tiene una responsabilidad moral sobre el mercado, a pesar de haberlo vendido en 2005. También piden a los vecinos que sigan confiando en los comercios del mercado que continúan abriendo sus puertas y ofreciendo productos de calidad con un trato personalizado.