En una sala de la Audiencia Provincial de Madrid se llevará a cabo el juicio de un celador del Hospital Ramón y Cajal de la capital, acusado de perpetrar dos agresiones sexuales contra una joven de 18 años que estaba ingresada en la planta de psiquiatría en abril y mayo de 2021.

El fiscal ha presentado una acusación pidiendo una condena de diez años de prisión por un delito continuado de abuso sexual, mientras que el abogado Juan Manuel Medina, en representación de la acusación particular, eleva la petición a 26 años de cárcel por dos delitos de agresión sexual y un delito de promoción y facilitación de consumo de drogas tóxicas.

De acuerdo con la versión del fiscal, el celador trabajaba en el turno de noche en el hospital y aprovechó su posición para cometer los abusos. La joven, que había sido ingresada por problemas de salud mental, fue víctima de estos actos aberrantes en dos ocasiones.

Según el relato del escrito judicial, el acusado ofreció cocaína a la joven y posteriormente la agredió sexualmente, dejando al descubierto sus pechos y continúo con los abusos. Además, el procesado volvió a cometer una agresión sexual en otra ocasión.

La víctima, tras estos terribles sucesos, llegó a autolesionarse como consecuencia de la grave afectación a su salud mental. El fiscal considera que se trata de un delito continuado de abuso sexual y pide una pena de diez años de cárcel, así como medidas de alejamiento de la víctima.

Además, se establece que el acusado deberá indemnizar a la víctima con una cantidad de 20.000 euros por los daños psicológicos y morales causados. La compañía aseguradora y la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid serán responsables para hacer frente a esta indemnización.