MADRID, 13 Mar.
La Audiencia Provincial de Madrid evalúa mañana a un acusado de emplear concretes falsos en comunidades para ganarse la seguridad de menores y recibir imágenes de contenido sexual.
La Fiscalía solicita para el procesado 18 años de prisión por cinco delitos de exhibicionismo y provocación sexual, un delito de producción de pornografía infantil, tal como un delito de abuso sexual.
Asimismo, le imputa otros delitos relativos al empleo de Internet, del teléfono o de cualquier otra tecnología de la información y la comunicación para entrar en contacto con un menor de dieciséis años y efectuar actos liderados a embaucarle a fin de que le facilitase material pornográfico o le muestre imágenes pornográficas en las que se represente o se muestre un menor.
Según el relato del fiscal, el acusado llegó a usar hasta ocho concretes de Instagram diferentes para entrar en contacto con las menores, se ganaba su seguridad y les remitía fotografías de contenido sexual.
En preciso, V.M.G.G. contactó con hasta cinco menores entre 2018 y 2019 con este modus operandi. A través de estos concretes, en múltiples oportunidades, pedía a las menores que le enviaran fotografías de ellas de naturaleza sexual. En entre los casos, además de esto, llegó a quedar con entre las chicas, a la que efectuó tocamientos.
En el instante de la detención, en su móviles inteligentes se encontraron ocho concretes de Instragram diferentes, fotografías y vídeos de carácter sexual, tanto de él como de las chicas.
Además, el Ministerio Público demanda la prohibición de comunicación con las menores por medio verbal, escrito o telemático por tiempo de diez años y proporciones de 5.000 euros para todas ellas, 15.000 en la situacion de la menor con la que llegó a quedar, en término de daños morales.